Estas coronas están confeccionadas en níquel cromo, son una buena alternativa a las hora de la restauración extensa en dientes primarios.

Son la forma más duradera de reparar la dentición primaria con una supervivencia que puede llegar a superar los 40 meses, si bien pueden ser más costosas que otros métodos lo cierto es que la inversión sí vale la pena.

También se usan en las caries profundas cuya remoción afecta dos superficies del diente en niños que están en la etapa preescolar. Además se usa en piezas con tratamiento pulpar o pacientes con alto riesgo de caries.

Su colocación se lleva a cabo mediante un método fácil, tengamos en cuenta que dentro del mercado de coronas existen las preformadas que se pueden adaptar a la perfección en los dientes primarios, devolviéndoles la anatomía evitando la pérdida del espacio interproximal que en algunos casos podría llegar a afectar la longitud del arco.

Método de colocación:

  • Se debe obturar el diente tratado o no con ionómero vítreo para restauraciones.
  • Reducir la superficie oclusal. Esto permite que la colocación de la corona sea más fácil.
  • Desgastar el espacio interproximal con piedra de diamante.
  • Elegir una corona del tamaño adecuado.
  • Realizar los ajustes de prueba.
  • Luego proceder al cementado.

Foto | Flickr

Compartir
Artículo anteriorMiedo al odontólogo
Artículo siguienteFactores productores y prevención de caries
Hola! Soy Leticia del Pino, trabajo como editora de contenidos y disfruto escribiendo sobre temas de interes como la odontología, la salud de los pacientes y los nuevos avances tecnológicos vinculados a la medicina en general.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

*