La distrofia muscular es una enfermedad genética que se caracteriza por causar debilidad muscular, la cual con el tiempo se incrementa llegando a ser severa.
Hay varios tipos de distrofia muscular que son causadas por genes diferentes y tienen síntomas algo diferentes, así por ejemplo algunos tipos afectan solo a los músculos de la cara, la cabeza, el cuello y las manos. En lo que respecta a la salud oral las personas el tipo de distrofia miotónica, pueden tener problemas para masticar, mover los labios y girar su cabeza.
En algunas personas con distrofia muscular hace que los dientes superiores e inferiores no se ajustan adecuadamente, lo cual tiene su origen en debilidad muscular en la lengua y esta empuja los dientes hacia fuera. Algunas personas con distrofia muscular también pueden tener problemas con las articulaciones de la mandíbula (articulación temporomandibular) y en tal caso tendrán dificultad en la masticación, chasquido de las articulaciones, dolores de cabeza o dolor muscular.
La distrofia muscular a nivel facial genera en las personas problemas de cepillado, uso de hilo dental o enjuague, por lo cual deben ser asistidos y sus tratamientos dentales se ajustarán al tipo de distrofia muscular que se padezca y el grado de gravedad que presente la condición individual.
Las personas con distrofia muscular deben lleva una lista completa de todos los medicamentos y las dosis que toma a su dentista, así como también establecer un contacto directo entre él y su médico de cabecera, para trabajen en equipo y así coordinar el tratamiento dental con la atención médica requerida para la enfermedad.
Para tener en cuenta; es recomendable mantener las citas con el dentista en una cómoda longitud de tiempo, especialmente si el estrés empeora su condición y además se deberá tener en cuenta que los sedantes, pueden empeorar el control muscular.
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