Actualmente son muchas las personas, tanto niños como adultos, que usan correctores dentales. Normalmente se colocan en pacientes de entre 10 y 14 años de edad, en estos casos se utilizan para enderezar los dientes que se encuentren torcidos o apiñados.
Tener los dientes derechos y una sonrisa atractiva ayuda a tener una mejor función dental, en ocasiones es necesario el uso de correctores para llegar a estos resultados en nuestra salud.
La buena higiene dental es fundamental para todas las personas, más aún para aquellas que se encuentran usando correctores dentales. Los alimentos y la placa pueden quedar atrapados en los pequeños espacio que quedan entre los correctores dentales y los alambres. Esto puede llegar a ocasionar caries o manchas en el esmalte.
Algunos alimentos pueden llegar a reaccionar ante la presencia de bacterias de la boca y los metales que se utilizan en los correctores dentales, generando un efecto de blanqueador que puede generar la aparición de manchas claras y permanentes en los dientes.
Existe un método que se debe aprender para poder limpiar de manera correcta los dientes y los correctores dentales. Lo mejor es que se realice un cepillado después de cada comida, además de usar hilo dental especial para ortodoncia. También será necesario que se limpie el corrector dental una vez por día, poniendo especial atención a los sitios que quedan debajo de los alambres.
Cuando termines con el cepillado mírate los dientes en un espejo para asegurarte de que se haya eliminado todas las partículas de alimentos. En el caso de que te encuentres en un lugar en donde no tengas cepillo de diente, de forma excepcional, podrás enjuagarte la boca con agua o con un enjuague dental.
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