Mantener la boca limpia es importante, pero más aún si se tienen brackets como consecuencia de un tratamiento de ortodoncia. Quien porte estos aparatos tendrán la responsabilidad de aprender a convivir con ellos y asearlos correctamente.
Cuando se tienen brackets hay mucho más riesgo de infecciones debido a que la comida se va quedando enganchada en el aparato metálico.
Una de las tareas de toda la vida, que ahora habrá que adaptar es el cepillado de los dientes. Haciéndolo correctamente se evita la aparición de otras enfermedades y que el tratamiento de ortodoncia se mantenga intacto.
-Usar el cepillo adecuado. En el mercado ya existen cepillos de ortodoncia específicos para brackets, con el fin de eliminar la mayor cantidad de restos de comida como sea posible.
-Tener a mano un cepillo interproximal. Es el que limpia entre dientes que también servirá para asear el aparato.
-Agua, mucha agua. Es mejor enjuagar la boca antes de iniciar el cepillado y también humedecer el cepillo. Sujeta el cepillo de forma inclinada formando un ángulo de 45º para que puedas sentir las cerdas del cepillo debajo del alambre.
-Cara a cara. Debes cepillar la cara externa e interna de los dientes con movimientos cortos, prestando especial atención a la zona situada entre la encía y los dientes pero, sobre todo, entre los brackets.
-Cepilla todo. No olvides limpiar también suavemente la lengua y el paladar.
-Tiempo. Tómate el tiempo que necesites para limpiar cada recoveco. La recomendación es que dures de 3 a 4 minutos en el proceso de cepillado.
-El más importante es el cepillado de antes de dormir, y por ende debe ser el más efectivo.
-Usa el hilo dental. Lleva tiempo y puede resultar algo molesto, pero su uso es una de las mejores maneras de eliminar los restos de comida
-El punto final. Un enjugue bucal que ayude a reducir la placa dental y las partículas de alimentos o alguna que otra bacteria persistente.
