Los avances en la ortodoncia nos dan más opciones y más estéticas a la hora de escoger tratamiento para nuestros dientes. Pero la pregunta que los pacientes se hacen es, ¿cuál es más efectivo y rápido?
Los pacientes tienen claro que el Invisalign es mucho más estético, casi ni se nota se presencia, pero muchos dicen que si es más caro y lleva más tiempo prefieren optar por los clásicos brackets. Por ello vamos a nombrar las diferencias entre uno y otro:
- Los brackets son un tratamiento mucho más rápido, ya que se pasa las 24 horas del día con ellos puestos. Es también el tratamiento más económico de todos. La parte negativa es que son más incómodos, producen heridas en la boca, no permiten que se pueda comer de todo y la higiene se hace mucho más complicada.
- El invisalign es un tratamiento mucho más estético, a primera vista no se nota que el paciente lo lleva. A su favor también tiene que es una prótesis que se puede retirar, por lo que a la hora de comer no molesta y permite que se pueda comer de todo. Para la higiene es igual, podemos retirarlo y limpiar nuestra boca a fondo sin molestias. En su contra está que es más caro y que es más duradero ya que, al ser una prótesis que se puede sacar, los pacientes no están las 24 horas con él lo que va retrasando el final del proceso.
Ambos tienen sus pros y sus contras pero según nuestras necesidades y deseos uno se adaptará más que el otro.