El tabaquismo es un problema que se debe tener en cuenta a la hora de colocar implantes dentales. Sabemos que los implantes son una excelente solución para reemplazar los dientes que, por diferentes razones, se fueron perdiendo. Gracias a ellos se podrá tener una sonrisa natural y recuperar totalmente la posibilidad de masticar y hablar correctamente.
Pero en el caso de los fumadores se tienen que tener presente algunos aspectos. El tabaco podría poner en riesgo el éxito de los implantes dentales, por eso los pacientes que fumen deben conocer esta posibilidad antes de empezar el tratamiento.
Sabemos que, como todas las cirugías, puede tener un mínimo riesgo, y fumar podrá incrementar este riesgo. Además, después de haber colocado los implantes podrían aparecer otros problemas como la aparición de la periimplantitis, una curación o recuperación más lenta. Mayor posibilidad de infección, posible fracaso de los implantes, reducción de la efectividad de los medicamentos.
Es normal que en los pacientes fumadores se inflame la zona al implante generando la aparición de una bolsa mucosa que no ayuda en la osteointegración, provocando que los implantes fracasen. Este problema se denomina periimplantitis. Si bien es un problema que se podría dar en cualquier paciente en el caso de los fumadores la posibilidad es realmente mayor.
En el caso de que estés evaluando la posibilidad de colocarte implantes dentales podrás evaluar, si es posible, la posibilidad de dejar de fumar Este tipo de tratamiento te ayudará en la salud general, así que puedes tomar como excusa tu nueva sonrisa para abandonar el vicio. Los expertos señalan que para poder recibir de manera efectiva un tratamiento de implantes tendrías que dejar de fumar al menos una semana antes de comenzar el tratamiento y no hacerlo por unas 6 o 7 semanas después de realizarlo.
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