Generalmente las leyendas urbanas se extienden sin que nadie pueda detenerlas de inmediato, y cuando hay una respuesta válida y lógica le cuesta mucho tomar el lugar que corresponde.
Por años se ha dicho que los cuadros de colores que tienen los tubos de pasta dental tienen que ver con su nivel de químicos y toxicidad. Nada más erróneo que eso.
Se ha dicho que si el recuadro es verde se trata de una pasta natural, si es azul entonces tiene un agregado medicinal, el rojo ya incluye componentes químicos y negro solo componentes químicos.
Esa clasificación es totalmente falsa.
Esos recuadros de colores no tienen que ver con lo que tiene el tubo adentro, sino con el proceso de fabricación y envasado. Conocidos como “eye marks” o “marca de ojos”, sirven como guías de registro para que puedan detectar cuando se debe cortar o doblar cada envase.
Hay que recordar que los tubos de pasta de dientes se realizan en tiras muy largas y se dividen tras un número determinado de centímetros para ofrecernos el tamaño final que nosotros compramos.
Por lo que es en este trascurso en el que la “marca de ojo” lleva a cabo su función; pues ésta se ubica en el lugar donde hay que cortar el tubo para su presentación unitaria, de forma que la máquina puede detectar los colores y determinar la parte final de cada tubo.
¿Por qué existen diferentes colores? Pues, dependen del fabricante, no tiene un significado relevante.
