Existe una relación entre el estrés y el dolor dental. En general es estrés se suele dar en personas que se encuentran atravesando situaciones complicadas, incluso inmenejables para ellos. Como consecuencia de los cuadros de estrés se podrá ver perjudicada la salud oral, incluso se podrá tener dolor dental.
Al tener estrés las personas podrán llegar a rechinar o a apretar los dientes, esto es una consecuencia directa del estado de nerviosismo. Al apretar o rechinar los dientes podrán aparecer otras consecuencias, tanto en los dientes como en las mandíbulas, ante esta situación lo más recomendable es acudir al dentista.
Todos, en mayor o menor medida, podemos estar frente a cuadros de estrés, ansiedad, nerviosismo, esto puede ser por la presión de la sociedad. El estrés y los dolores dentales están en una relación estrecha, ya que frente a esta situaciones las personas podrán apretar los dientes generando molestias y dolores, en otros casos hasta podrían aparecer dolores de cabeza.
Para terminar con estas molestias te aconsejamos pedir una cita con tu dentista de confianza, seguramente te indicará un tratamiento personalizado, por lo general se aconsejará el uso de una férula de descarga.
Una persona podrá abrir y cerra la boca más de 2 mil veces al día sin que existan problemas. El problema se dará cuando esto sucede por la noche. Una persona que se encuentra sufriendo consecuencias orales del estrés pueden llegar a abrir y cerrar la boca sin darse cuenta.
Las personas que aprietan los dientes por la noche sin darse cuenta pueden llegar a ejercer una fuerza puntual de 10 a 35 kilos por diente, pero las personas que sufren de bruxismo llegan a emplear una fuerza de unos 150 kilos de carga al contactarse las piezas dentales, lo que provoca desgaste, fracturas y grietas.
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