Cuando éramos niños nuestros padres nos prohibían masticar chicles, por ser un hábito dañino para los dientes. Pero hoy esa situación es una leyenda.
La aparición de los chicles sin azúcar dio un vuelco a la creencia a tal punto que los dentistas son los primeros en aconsejar masticarlos.
La razón es que al ser sin azúcar, ya no es un elemente perjudicial, y más bien ayuda a proteger dientes y encías entre las comidas, cuando no puedas cepillar tus dientes con un cepillo y con pasta dental con flúor.
El mayor riesgo para los dientes ocurre justo después de comer. La placa bacteriana y los azúcares en los alimentos y bebidas producen ácido, que disuelve lentamente el esmalte.
Para reducir el riesgo es aconsejable masticar chicles sin azúcar, debido a que ayudan a que la boca produzca más saliva: la defensa natural de la boca contra el ácido.
Además, previenen la erosión dental causada por el ácido en alimentos y bebidas, como frutas cítricas, jugos de fruta y gaseosas.
Al ayudarnos a producir más saliva, los chicles sin azúcar también reducen este tipo de ataques de ácido.
Masticar chicle sin azúcar por 20 minutos después de comer o beber puede incrementar el flujo de saliva y ayudar a reemplazar los minerales más rápidamente.
La sequedad bucal y el mal aliento también se pueden combatir al masticar chicles sin azúcar.
