Más allá de lograr una sensación de frescura en la boca, una limpieza dental ayuda a evitar enfermedades bucales como la caries y la gingivitis, porque mantiene a raya la placa bacteriana.
También se le conoce como profilaxis dental y es un proceso bastante sencillo que el dentista realiza sin necesidad de anestesia en 30 o 40 minutos.
Es una revisión en la que el especialista elimina la placa bacteriana, el sarro y las manchas que se acumulan en los dientes o debajo de las encías, garantizando así una higiene bucal completa.
Es un tratamiento universal, pues todas las personas pueden someterse a una limpieza dental sin problema alguno, todo lo que conseguirá serán beneficios. Las excepciones son en los pacientes con periodontitis crónica; ya que estos pacientes requieren de otro tipo de tratamientos especializados de limpieza dental.
Dentro de los principales beneficios de este procedimiento, se destaca la eficacia para eliminar restos de comida e impurezas localizadas entre los dientes que a través de una rutina de cepillado diario no se pueden erradicar.
-Erradicar las manchas en el esmalte dental.
-Reducir la inflamación de las encías.
-Identificar el estado de los terceros molares o muelas del juicio.
-Eliminar la placa bacteriana y el sarro.
-Prevenir periodontitis u otras enfermedades como las caries o gingivitis.
-Reforzar el esmalte y protección de los dientes.