Los problemas y enfermedades dentales que tenemos cuando somos adultos provienen en su mayoría de los malos hábitos que tenemos en la niñez, sobre todo en la etapa de la vida que comprende los tres primeros años.
Prevenir esas “malas costumbres” ahora que somos padres será imprescindible para que nuestros hijos tengan una salud bucal plena el resto de su vida.
Desde el punto de vista de la salud bucal, existen diversos tipos de patrones de conducta nocivos que se instalan precozmente en la vida de los niños, mismos que pudiesen generar consecuencias negativas.
Los bebés tienen la necesidad de succionar, pues es su forma de alimentarse, por lo que comienza a chuparse el dedo. Los padres, para evitar que lo haga, le dan un chupete. ¿Esto puede perjudicar los futuros dientes del bebé?
La respuesta es sí. Permitir el uso del chupete por mucho tiempo puede causar la deglución atípica, provocando la mordida abierta. Los dentistas para niños recomiendan retirar el chupón antes de los dos años de edad para evitar que provoque la desviación de los dientes delanteros.
Pero si además, para calmar al bebé, el chupete es impregnado de alguna sustancia azucarada, lo que se puede crear es un ambiente propicio para la caries, que afectará la primera dentición y también la dentadura definitiva.
Permitir que el bebé se duerma con el biberón en la boca genera un desgaste temprano a los dientes del niño, ya que el azúcar de la leche permanece en la boca durante muchas horas, mezclándose con gérmenes y bacterias.
Luego, el chuparse los dedos puede provocar deformación del paladar si se hace pasados los cuatro años, por lo que ese niño requerirá ortodoncia en el futuro.
Alimentarlos con comida triturada no ayuda en nada a que los músculos de la boca se desarrollen. Morder brinda un masaje y estímulo para la encía así como un entrenamiento para los músculos de la lengua. Por ello, a los niños hay que darles alimentos sólidos apenas tengan el primer diente.
Estos hábitos son normales y pueden permitirse, pero no por mucho tiempo. De esta manera se evitará tener problemas dentales en el futuro.
La prevención comienza desde temprana edad, NO erradicando, sino evitando que siquiera se construyan hábitos nocivos
Es terrible que algunos padres den un chupón o biberón azucarado a sus hijos, eso dispara el riesgo de caries
Excelente artículo
Saludos