Hacer que los niños tomen las rutinas de higiene bucodental puede ser una tarea demandante. Por eso, el mundo está lleno de alternativas, como los juegos, las aplicaciones en los móviles y las canciones.
Pero, un cepillo eléctrico para el niño puede ser la solución definitiva, pues ellos se sienten atraídos de forma general por los aparatos electrónicos.
Los cepillos eléctricos infantiles tienen grandes ventajas, como un cabezal adaptado y las revoluciones reguladas para no hacer daño a las bocas de los pequeños, que son más delicadas que las de los adultos.
Ayudarán a los niños con el cepillado dental y a mejorar la eliminación de la placa bacteriana, llegando incluso a alcanzar parcialmente los espacios entre los dientes y las muelas, algo más complicado con un cepillo manual.
Solo hay que tomar en cuenta que su mal uso puede causar daños, así que antes de comprarlo hay que consultarle al odontopediatra, que además dará instrucciones precisas.
De cualquier manera, las pautas son similares, solo habría que cambiar el barrido que se hace con el cepillo manual y estar más atentos a la posición del cabezal sobre los dientes.