El periodo de embarazo y lactancia en la vida de una mujer es muy especial en muchos aspectos, pero puntualmente en lo que respecta a la salud se extiende a dos personas, por ello los cuidados deben extremarse y por lo general se recomienda no utilizar medicamentos, salvo excepciones evaluadas por un profesional.
Lo ideal es que durante el embarazo no se tome ningún medicamento, especialmente durante el primer trimestre, sin embargo a veces esto no es posible debido a los beneficios que ofrece un medicamento ante una situación en la cual puede superar los riesgos relacionados con su uso.
En lo que respecta a los medicamentos dentales más comunes, se pueden utilizar durante el embarazo, excepto algunos sedantes y ciertos antibióticos, que deberán ser evitados, pero siempre será el profesional el que tome las decisiones al respecto.
La FDA americana clasifica a muchos medicamentos de prescripción con diferentes niveles de riesgo para el feto, así se crearon cinco categorías: A, B, C, D y Embarazo Categoría X, siendo ésta última categoría la que hace referencia a drogas perjudiciales para el feto.
Siempre hable con su dentista sobre los medicamentos que le prescriben durante el embarazo, pero es muy importante saber que el profesional de la salud oral, deberá reunirse con su obstetra antes de recetar un antibiótico o un medicamento para un dolor de dientes.
Con respecto a la lactancia de igual modo las drogas consumidas por la madre son excretadas en la leche materna, aunque en dosis generalmente pequeñas que puede oscilar en el 1 o 2 por ciento, sin embargo se debe tener cuidado, más aun si su bebé es un recién nacido o prematuro.
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