En un artículo anterior hemos dado un vistazo general acerca de lo que puede suceder cuando un pequeño que sufre TEA acude a una consulta con el dentista y resaltamos la importancia de prepararlo con anterioridad. Por eso hoy nos referiremos específicamente a ese punto, hablaremos acerca de la manera en que se debe preparar a un niño autista para la visita al consultorio.
Existen algunos consejos y ciertas estrategias que puedes seguir para que la visita al dentista resulte positiva.
Lo primero que debes hacer es preparar al pequeño para la visita, si bien no es necesario inquietarlo antes de tiempo pero siempre es preferible informarles y prevenir lo que va a suceder y lo que le van a hacer en el consultorio.
Se pueden usar recursos visuales, se pueden usar imágenes o fotografías para distraer el pequeño, así no se dará cuenta de lo que hace el dentista.
Los dentistas pueden permitir que los niños que sufren TEA lleven al consultorio algún objeto que le resulte relajante, de esta forma estarán ocupados y distraídos. Algunos niños disfrutan escuchando música, que los relaja y distrae.
Controla el tiempo podrá ayudar a que el niño se mantenga distraído. Si establecemos un tiempo limitado el paciente se podrá distraer fácilmente, y no estará pendiente del trabajo del dentista y de las sensaciones que puede ir teniendo. Si en el consultorio se puede ver un reloj bien grande esto podrá ser muy útil.
En el caso de que todos los consejos anteriores no funcionen se puede utilizar la sedación consciente, en este caso será necesario háblalo con el dentista y decidirlo de manera conjunta.
Foto | Flickr