A pesar de que actualmente se aprecia una reducción en la extracción de piezas dentales (exodoncias) aún se siguen llevando a cabo. Entre sus causas más comunes se encuentran la destrucción de un diente debido a caries, las infecciones crónicas, durante el tratamiento de ortodoncia al necesitar generar espacio y también por la necesidad de facilitar la construcción de una prótesis dentaria.
Según la posición y el tamaño de la pieza dental, así como su grado de destrucción, la extracción dental será simple o compleja. En cualquier caso, puede ser necesario que el odontólogo prescriba analgésicos, antiinflamatorios o antibióticos.
¿Qué cuidados se deben tomar luego de una extracción?
Por el efecto de la anestesia, que puede durar entre 2 y 4 horas después de la intervención, el paciente tiene los labios y la lengua insensibilizada, por lo cual puede lastimarse al morderse sin sentir dolor. Se recomienda no comer en ese período de tiempo, y una vez que haya pasado el efecto se debe comer alimentos fáciles de masticar y sobre todo evitar las comidas calientes que puedan irritar la zona operada.
Sin duda otro consejo es mantener una buena higiene de la zona bucal para evitar una posible infección, además de cepillarse los dientes con un cepillo de dientes suaves, teniendo un especial cuidado alrededor de la zona afectada. También se pueden realizar enjuagues con clorhexidina. Los pacientes que fumen es de vital importancia que lo eviten durante las 24 horas posterior a la extracción.
En caso de que el sangrado persista o note signos de infección, debe consultar de nuevo al odontólogo.
