bruxismo

Cuando una persona rechina o aprieta los dientes de forma involuntaria, y sobre todo al dormir, se le diagnostica bruxismo, una enfermedad que puede provocar fuertes dolores en la mandíbula y pérdida de piezas dentales.

El bruxismo  afecta la articulación tempero mandibular, y el dolor articular que se produce puede extenderse hacia el oído medio.

Por eso, si comienzas a sentir esos dolores, lo idea es acudir de inmediato a un dentista para determinar las medidas necesarias de tratamiento y, de ser necesario, recibir atención quirúrgica maxilofacial.

Sin embargo, mientras la visita al especialista se da, debes disminuir el estrés emocional o situaciones de tensión, pues generalmente ocurre cuando hay preocupaciones, ansiedad y estrés.

Para el bruxismo moderado o leve, los especialistas realizan terapias y medidas generales de reposo mandibular, dieta, fisioterapia, así como uso de guardas o férulas de acetato o acrílico para uso nocturno, principalmente, cuya función es distender el espasmo muscular masticatorio, que puede ser de hasta seis meses.

El bruxismo no puede prevenirse, pero lo aconsejable es mantener una vida sana, reducir las situaciones de estrés y visitar regularmente al dentista para evitar la pérdida prematura de los dientes por el traumatismo constante que se ejerce sobre ellos.

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