Aunque parezca una tarea sencilla, muchos de nosotros cometemos errores que pueden afectar a nuestra salud bucodental. Por eso, te vamos a dar algunos consejos para que cepilles tus dientes de forma eficaz y prevengas problemas como la caries, el sarro o la gingivitis.
Lo primero que debes hacer es elegir un cepillo adecuado para tu boca. Lo ideal es que sea de cerdas suaves o medias, que no dañen el esmalte ni las encías, y que tenga un tamaño que te permita acceder a todas las zonas de tu dentadura. También puedes optar por un cepillo eléctrico, que tiene una mayor capacidad de limpieza.
El segundo paso es aplicar una cantidad adecuada de pasta dentífrica, que contenga flúor para proteger el esmalte. No hace falta que pongas mucha, con el tamaño de un guisante es suficiente.
El tercer paso es cepillar tus dientes con movimientos suaves y circulares, sin apretar demasiado. Debes dedicar al menos dos minutos a esta tarea, y repartir el tiempo entre las distintas zonas de tu boca: la cara externa, la interna y la masticatoria de los dientes. No te olvides de limpiar también la lengua, con un raspador o con el mismo cepillo.
El cuarto paso es enjuagar tu boca con agua o con un colutorio, para eliminar los restos de comida y de pasta. También puedes usar hilo dental o cepillos interdentales para limpiar los espacios entre los dientes.
El quinto y último paso es repetir este proceso al menos dos veces al día, preferiblemente después de cada comida. Así mantendrás tu boca sana y tu sonrisa radiante.
Si quieres saber más sobre cómo lavarte los dientes correctamente, puedes consultar este enlace, donde encontrarás más información y consejos de los expertos.