Cuando varios dientes se amontonan y crecen unos sobre otros, invadiendo espacios ajenos, estamos frente a un apiñamiento dental, que aparece principalmente por la falta de espacio en el hueso en el que deberían insertarse las piezas.
Y entonces vienen los problemas: la sonrisa de la persona no está alineada y, por ello, no tiene la estética deseada; se facilita la acumulación de placa bacteriana, ya que es una zona más difícil de limpiar, por lo que aumenta el riesgo de enfermedades bucodentales como caries, gingivitis o periodontitis.
El apiñamiento dental puede ser leve o moderado, cuando un tratamiento de ortodoncia resolverá sin inconvenientes la arcada dental; o severo, cuando se deben realizar extracciones de algunos dientes antes de utilizar la ortodoncia para alinearlos.
A pesar de los problemas que provoca, el apiñamiento es una de las alteraciones de la boca más comunes y la razón principal del uso de ortodoncia. Puede afectar de igual manera a niños y a adultos, incluso repetirse en adultos que ya usaron ortodoncia en el pasado, pero no realizaron el mantenimiento posterior.
¿Por qué hay poco espacio en donde deben salir los dientes? Son tres las causas habituales de esta patología:
-Genética. Llamado también apiñamiento primario, puede agravarse por una mala dieta alimenticia. Para evitarlo, es muy importante no alargar demasiado la dieta blanda en bebés, ya que el hueso de la mandíbula tarda más en desarrollarse y puede afectar al desarrollo de los dientes definitivos.
-Malos hábitos. Chuparse el dedo, usar el chupete durante demasiado tiempo o respirar por la boca pueden provocar apiñamiento secundario.
-Terceros molares o muelas del juicio. Se conoce como apiñamiento terciario y se produce en la edad adulta debido a la falta de espacio en el hueso de la mandíbula.
El apiñamiento dental puede solucionarse con stripping dental, un tratamiento de ortodoncia o con alguna extracción en casos severos.
El stripping es una reducción del esmalte mediante herramientas manuales o mecánicas, ganando espacio para recolocar los dientes. Pero a veces, por la severidad del caso, es necesario extraer piezas. Quienes se someten a estos procedimientos deberán usar retenedores dentales para prevenir la recurrencia del apiñamiento.