Según investigaciones de la Facultad de Odontología en la Universidad de Malmö (Suecia), tanto el cáncer como otras enfermedades graves, dejarían huellas de su presencia en la saliva de los pacientes, por ello en un futuro podría ser posible la detección de estas enfermedades en sus primeras etapas con una simple prueba de saliva, lo cual representaría un gran paso para la medicina preventiva en la lucha contra la enfermedad.
Como todos sabemos una de las bases de la medicina es el diagnóstico precoz, ya que dé él depende el éxito sobre el tratamiento de una enfermedad, por ello esta nueva forma de detección de enfermedades a través de la saliva, representaría uno de los avances más importantes en medicina preventiva.
Estudios previos han mostrado que las enfermedades de la boca y la garganta pueden ser diagnosticadas con una muestra de saliva, por lo cual un grupo de investigación se encargó de estudiar en forma más amplia sus alcances encontrando el contenido en la saliva de trazas de otras enfermedades con un componente inflamatorio, las cuales incluyen por ejemplo; el crecimiento de ciertos tumores, diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Los investigadores han logrado vincular la secreción de sustancias en la saliva de los pacientes con estas enfermedades, descubrimiento que tendrá una gran importancia para los exámenes médicos del futuro, vislumbrando la posibilidad de que en lugar de tener que visitar al médico, los pacientes podrán simplemente limpiar la parte interior de su boca con un bastoncillo de algodón y enviarlo para su análisis, a partir de cuyo resultado, en el caso de haber signos de enfermedad, será llamado para su médico.
Esta nueva forma de detección precoz ahorraría tiempo y dinero, tanto para los profesionales sanitarios como para los pacientes, pero quizás aún más importante es que la simplicidad del método permitiría que un mayor número de personas puedan controlar su salud con mayor eficacia, lo que a su vez según los investigadores, brindará la posibilidad de llegar a sectores de la población a los que no se llegaba antes, aumentando las posibilidades de detección en una etapa temprana, con todo lo beneficioso que esto significa para la salud mundial.
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