A nadie le gusta tener mal aliento. Esta desagradable enfermedad, llamada halitosis, se puede combatir antes o durante su aparición, para evitar estar en situaciones incomodas.
Lo primero que debes determinar es por qué tienes mal aliento. Lo más común es que tu higiene bucal sea deficiente, y los restos de comida que se van descomponiendo en la boca crean un ambiente ideal para la halitosis, pero además toma en cuenta que esta enfermedad se puede originar por inflamación de las encías, enfermedades sistémicas, periodos largos de ayuno, caries, anorexia y reflujo gastrointestinal.
¿Cómo solucionar un aliento pesado?
-Aplica la correcta técnica de cepillado.
Un buen cepillado dental debe durar por lo menos 2 minutos y realizarse 3 veces al día: por la mañana, tarde y siendo la más importante por la noche, ya que se reduce el flujo salival que es un encargado más de eliminar las bacterias.
-Usa hilo dental y enjuague bucal.
Al cepillarse los dientes solo se elimina 50% de las bacterias, por lo que el uso del hilo dental y el enjuague ayuda a eliminar el resto de las bacterias que se quedan atrapadas entre los dientes y por debajo de las encías.
-Asiste a una valoración médica.
Además de las causas relacionadas con la higiene, el mal aliento puede provenir de alguna enfermedad gastrointestinal, hormonal o renal. Por lo que es conveniente también visitar a un médico general para una revisión de rutina.
-Evita alimentos de olor fuerte.
El mal aliento no siempre lo causa una higiene oral deficiente, los alimentos como el ajo, la cebolla, las anchoas, café o el atún también pueden provocar olores desagradables.
-Acude a una limpieza dental periódica.
La limpieza dental o profilaxis es un procedimiento donde el médico especializado elimina la placa bacteriana, el sarro y manchas que se acumulan en los dientes o debajo de las encías, garantizando una higiene total.