Tener unos dientes blancos y brillantes es la meta de todos, pero al no cuidarlos como deberíamos, y por el mismo paso de los años, se van poniendo amarillos y opacos.
Algunos alimentos y bebidas ayudan a que los dientes vayan perdiendo su brillo, como el café y el vino. Pero si los cepillas unos minutos después de tomarlos, su efecto será menos evidente.
Hay quienes recurren a remedios caseros para hacer más blancos sus dientes, pero debe tener cuidado con algunos tratamientos que pueden volverse una pesadilla, advierte la Asociación Dental Americana (ADA).
Uno de los mitos más extendidos es que frutas ácidas mezcladas con bicarbonato de sodio hará los dientes más blancos. Esto lo que puede provocar es el debilitamiento del esmalte dental, la dura y a la vez fina capa exterior que protege los dientes de caries y sensibilidades extremas.
Luego está la exfoliación de los dientes, y el producto más nombrado es el carbón activado, que es un producto altamente abrasivo y áspero para conseguir brillantez y solidez del esmalte. El resultado puede ser todo lo contrario.
Los aceites y la cúrcuma están entre los mitos más mencionados para blanquear los dientes, pero los especialistas insisten en que no hay evidencia científica fuerte para hacer esta afirmación, y sugieren dejar estos productos para las comidas.
Para un blanqueamiento dental seguro, lo ideal es acudir al odontólogo y plantearle la necesidad. Él dará opciones profesionales.
