La abrasión dental es el desgaste mecánico o la pérdida progresiva de la superficie de un diente debido a acciones distintas a la caries o al trauma dental.
Es una forma de daño dental causado por las fuerzas aplicadas a los dientes. Generalmente es causada por elementos externos, como el cepillado agresivo de los dientes, que provoca que más que limpiar, estaríamos “puliendo” estos. Si no se trata, la abrasión puede traspasar el esmalte, llegar a la dentina interna y, finalmente, alcanzar el cemento, capa que ayuda a asegurar los dientes dentro del hueso maxilar.

Causas de la abrasión dental

  • Como hemos dicho antes, un cepillado demasiado agresivo, que ejerce demasiada presión sobre los dientes. Este suele darse cuando se usa un cepillo de cerdas muy duras.
  • Al uso de cepillos con cerdas demasiado duras, se une el uso de pastas dentales que puedan tener componentes demasiado abrasivos.
  • Usar con frecuencia palillos, dada la falsa creencia de que los palillos son buenos para quitar los restos de comida entre los dientes. El elemento que se ha de usar para realizar una limpieza correcta de nuestra dentadura siempre serán el hilo dental o cepillos interdentales

Consecuencias de la abrasión dental

  • Sensibilidad dental, especialmente con la ingesta de alimentos muy fríos o muy calientes.
  • Retracción de las encías. Puede desembocar en ello debido a un cepillado agresivo.
  • Decoloración del esmalte de los dientes, presentando tonalidades más amarillentas que de costumbre e incluso tonalidades marrones al verse afectada a la dentina.
  • Aparición de grietas o fisuras en el esmalte dental, así como rugosidades en forma de “V”.
  • Por supuesto, y muy comúnmente, caries, al perder la capa dental protectora.

Tratamiento de la abrasión dental

  • La prevención será la mejor arma contra la abrasión dental. Debemos tener conciencia de que un cepillado agresivo no mejora la higiene de nuestra boca.
  • Dependiendo de la gravedad de la abrasión dental, se procederá a reconstruir o restaurar el esmalte, colocar unas férulas de descarga para evitar que la abrasión vaya a más o incluso usar coronas dentales.
  • Injerto de encía. Si se ha producido una retracción en las encías, el dentista valorará si se debe realizar un injerto para que no se pierda el diente o deje de haber hipersensibilidad al frío y calor.
  • Se recomienda el uso de cepillos de cerdas suaves, así como el uso del hilo dentaly cepillos interdentales para completar la higiene.
  • Si tenemos dudas de estar ante un caso de abrasión dental, debemos acudir al especialista para que lo analice y sea quien nos pueda prescribir un plan de tratamiento a medida adecuado al problema que presente nuestra dentadura.
  • Serán siempre el profesional dentista o higienista dental, quienes ayudarán a corregir los malos hábitos que la provocan, enseñando cómo realizar una correcta higiene bucodental, no debiendo nunca tomar remedios caseros o consejos de conocidos por muy satisfechos que hayan podido quedar con un tratamiento ya que cada caso siempre será personal y con peculiaridades particulares.

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