Con el incremento de la demanda de ortodoncia en los adultos, aparecieron en el mercado tratamientos sin supervisión médica y poco ortodoxos que más que resolver un problema, podrían complicar el cuadro clínico.

Por ello, la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO) ha creado un protocolo para el uso adecuado de la ortodoncia plástica o férulas transparentes, en colaboración con AESOR.

La ortodoncia invisible es una técnica, controlada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que consiste en férulas extraíbles de plástico transparente fabricadas a medida para cada paciente, siguiendo las indicaciones de un ortodoncista, en función de un correcto diagnóstico de la maloclusión y de la planificación del tratamiento adecuado para su corrección.

Pero han proliferado tratamientos que se publicitan en internet y que prometen su uso sin una supervisión especializada.

“La ortodoncia no puede tomarse como una moda, es una disciplina sanitaria que debe diagnosticarla, planificarla y supervisarla un profesional cualificado”, indicó SEDO.

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