Es muy probable que hayas oído hablar del bruxismo, rechinamiento de dientes y consecuencias de este para los dientes. El bruxismo se define por la acción de apretar o frotar la cara oclusal de las piezas dentales de la arcada inferior o mandíbula, contra la cara oclusal de las piezas antagonistas, situadas en la arcada superior o maxilar, provocando un desgaste continuo de las mismas involuntariamente. Es una de los motivos principales por los que se acude al dentista, sobre todo en ciudades con un ritmo de vida agitado.
Si el bruxismo es un término conocido a día de hoy, muchas veces relacionado con el estrés, suele ser más común en adultos, pero puede aparecer en niños ante situaciones estresantes. Para diagnosticar el bruxismo infantil, lo primero será tener en cuenta situaciones física o mentales que puedan estarle causando ansiedad o estrés. También será importante observar si el bruxismo se da de manera eventual o permanentemente.
Será conveniente y necesario comunicarlo al odontopediatra tan pronto notemos estos síntomas en el menor, para que pueda valorar los daños desde el punto de vista no solo de los dientes, sino también de la tensión muscular, dolores de ATM, dolores de cabeza y si es necesario, indicar una férula de descarga de silicona o placa miorrelajante. El bruxismo, que con frecuencia ya se presenta en bebés, está considerado por los expertos como uno de los factores de riesgo para los trastornos de la articulación de la mandíbula y los músculos de la masticación en adultos (disfunciones craneomandibulares).
Una de estas férulas que existen en el mercado, fabricadas exclusivamente para contrarrestar el bruxismo infantil es el OrthoPreventAligne, un dispositivo diseñado para tratar el bruxismo en las dentaduras primarias y mixtas. Compuesto de silicona elástica, es capaz de soportar las presiones de masticación más fuertes, así como el rechinamiento continuo de los dientes por la noche. Su efectividad se deriva de su mecanismo de acción, que hace que los dientes se aprieten, por lo que la fricción se detiene y la articulación de la mandíbula se alivia. Al mismo tiempo, los dientes están protegidos contra la abrasión y el daño del esmalte.
Es una férula diseñada para un uso cómodo que ayuda al pequeño a paliar los daños durante la noche. La idea es lograr que se relaje, por lo que se aconseja combinar con terapias relajantes, y antiestrés, fisioterapias, etc.
