El Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante (COEA) han explicado los problemas de salud bucal asociados a trastornos de la alimentación, pues la anorexia y la bulimia que pueden dañar los dientes en diversas formas.
Según los expertos de la organización, “un individuo bulímico entra en un ciclo de ingestas alimenticias excesivas y posteriormente se provoca el vómito. Los ácidos del estómago presentes en los vómitos atraviesan la boca y pueden erosionar el esmalte dental provocando caries, decoloración y pérdida de los dientes”.
En este sentido, como los dientes aparecen desgastados y amarillentos, el dentista puede ser el primero en detectar signos de trastornos alimenticios. Adicionalmente, la odontología cosmética ayuda a corregir el esmalte dental deteriorado.
A su vez, en los casos de anorexia, COEA indica que “el estado de semi inanición del individuo priva al cuerpo de los nutrientes que necesita. Puede suceder que se desarrolle una osteoporosis que debilite los huesos maxilares que sostienen a los dientes provocando la pérdida de ellos”.
La organización concluye que en ambas enfermedades es clave el tratamiento de las causas subyacentes que conducen a la anorexia y a la bulimia, además de las complicaciones dentales que resultan. Puntualizan que, si bien el dentista puede corregir el esmalte dental deteriorado, no puede tratar el trastorno de alimentación real, por lo cual es importante un seguimiento médico integral.
