No es muy común, pero ocurre que los fallos de anestesia dificultan la realización de tratamientos al odontólogo y aumentan la ansiedad del paciente ante el hecho de tener que acudir nuevamente a consulta.

Por ello, un grupo de profesionales hicieron una revisión bibliográfica para analizar la evidencia acerca de los motivos de este fallo anestésico y sus posibles soluciones.

Se trata de los especialistas Ane Fátima Silva, Alberto Sierra Lorenzo, Ana Boquete Castro y Alejandro Peña López.

Recuerdan primero que los tratamientos en dientes de la arcada inferior se asocian a una mayor percepción de dolor, sobre todo si se trata de molares con pulpitis irreversible.

Y para esos casos, el bloqueo del nervio dentario inferior es la técnica anestésica más utilizada para molares mandibulares en endodoncia. “Sin embargo, no siempre obtenemos los resultados deseados, teniendo un fracaso de entre el 37 y 85%”, incluyen en sus comentarios.

El éxito del bloqueo no es unifactorial. Las variaciones de la pulpa inherentes a la inflamación son un factor a tener en cuenta. Administrar AINES 1 hora antes, realizar un primer bloqueo utilizando mepivacaína mediante técnica de Gow-Gates o Akinosi, complementar con técnicas adicionales como infiltración bucal con articaína y evitar el uso de lidocaína son las principales estrategias a utilizar, resume Dental Tribune en una nota.

“La incapacidad de conseguir anestesia pulpar aumenta el miedo del paciente, aumenta también la duración del tratamiento y genera dudas sobre el profesional”.

No hay ningún método que garantice anestesia profunda y eficaz. Son necesarios más estudios en relación al fallo anestésico en molares de la arcada inferior para poder ofrecer un control efectivo del dolor.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here

*