Los medicamentos comunes, que se venden sin prescripción médica, como los calmantes, pueden llegar a tener efectos en la boca de quien los consume. Por ello, es importante que el paciente y su dentista estén conscientes de resolver estos problemas.
Los efectos secundarios bucales de medicamentos aparecen ya sea directamente en la boca, debido a que las medicinas se toman de forma oral, o causan un efecto sistémico que se manifiesta en la boca.
El dentista puede hablar con su paciente sobre estos efectos y como contrarrestarlos, o remitirlo al médico que atiende su problema de salud.
No se pueden dejar de lado estos efectos secundarios, pues pueden impactar la calidad de vida de su paciente y finalmente su cumplimiento con el tratamiento prescrito.
Algunos de estos medicamentos con potencialidad a tener efectos secundarios en la boca son la aspirina, los AINE, la metildopa, los inhaladores de corticosteroides, entre otros.
Por ejemplo, algunos AINE y la metildopa están asociados con las erupciones liquenoides o con la candidiasis bucal que pueden ser complicaciones de tratamiento con antibacteriales y puede ser un efecto secundario infrecuente de inhaladores de corticosteroides.