Una de las formas de atacar la ansiedad y los miedos de los pacientes que acuden con fobias al consultorio dental es la aromaterapia, un viejo recurso del que pocas clínicas sacan provecho.
El uso de aceites esenciales que perfumen la sala de espera y el mismo consultorio puede ser muy útil para reducir niveles de estrés, preocupaciones e incluso ataques de pánico entre los pacientes.
En la aromaterapia se utilizan esencias extraídas naturalmente de las plantas, en forma de aceites esenciales altamente concentrados de vegetales aromáticos, incluyendo hierbas, hojas, flores, ramas, cortezas de frutas, madera y raíces.
Algunos olores ya están bien definidos, de acuerdo a lo que logran en las personas, para usar en sesiones de relajación. Los siguientes son algunos ejemplos:
-Ansiedad: bergamota, madera de cedro, salvia, incienso, geranio, lavanda, mandarina, neroli, pachulí, manzanilla romana, rosa, sándalo, vetiver.
-Miedo: bergamota, madera de cedro, salvia, incienso, pomelo, jazmín, limón, neroli, naranja, manzanilla romana, sándalo, vetiver, rosa y pettigraine.
-Inseguridad: bergamota, madera de cedro, incienso, jazmín, sándalo, vetiver.
-Pánico y ataques de pánico: incienso, helichrysum, lavanda, neroli, rosa.
-Estrés: benjuí, bergamota, salvia, incienso, geranio, pomelo, jazmín, lavanda, mandarina, neroli, pachulí, manzanilla romana, rosa, sándalo, vetiver, ylang ylang.
Algunos aceites pueden tener efectos perjudiciales para las embarazadas, por lo que no deben colocarse en difusores generales. Algunos de ellos son: salvia clary, eucalipto, incienso, geranio, menta, romero y pomelo.