El blanqueamiento dental es un tratamiento muy agresivo para los dientes débiles y sensibles aún de los niños, por esta razón hay que ser mayor de 18 años para poder someterse a el mismo. Es imprescindible tener una boca sana, tanto a nivel de dientes como de encías.
No hay que asustarse o preocuparse en el momento que los niños cambian los dientes de leche por los permanentes, cuando estos salgan un poco más amarillos, es normal. La boca de los niños y niñas están en constante cambio, por eso es necesario esperar a que hayan mudado todas las piezas dentales para luego, poder realizar este tratamiento.
¿Tiene tu niño dientes oscuros?
Esto es resultado de beber refrescos de cola, zumos oscuros, de comer caramelos y otros alimentos. Sin embrago, un solo diente oscuro puede ser resultado de una lesión ya sea por caries o traumatismo. Teniendo en cuenta lo comentado, es de suma importancia llevar nuestros niños al dentista de forma periódica, para hacer revisiones de rutina y una limpieza cada seis meses.
Además, puedes contribuir a mantener sus dientes blancos con algunos hábitos saludables como:
- Mantener una buena higiene dental diaria
- Evitar alimentos con azúcar y que manchan los dientes
- Visitas regulares al dentista desde pequeños
- Llevar una dieta saludable, rica en lácteos, verduras y frutas
