Las clínicas dentales deben ser agradables y confiables. Iluminadas, con espacios cómodos, que no impulsen el miedo que algunos de los pacientes puedan tener de ir a visitar al dentista. Y que además ofrezcan un ambiente de buen servicio.
Son espacios que trascienden las cualidades estéticas, entendiéndose como una suma de cualidades ambientales y multi-sensoriales. El espacio físico puede crear experiencias e interacciones que producen emociones. Cuando el espacio consigue conectar emocionalmente con las personas, su mensaje se percibe de una forma más profunda y más duradera, creando lazos más fuertes de confianza y fidelidad.
Al tomar en cuenta este tipo de detalles aumentará el número de pacientes y generará más ingresos para la clínica. Al mismo tiempo, el espacio influirá positivamente en el grado de satisfacción del equipo médico, que será más efectivo y contribuirá de forma positiva en la experiencia del paciente.
Póngale atención a estos elementos en la configuración de los espacios de su clínica:
-Distribución. Una buena distribución de la planta que tenga en cuenta todos los parámetros, optimizando el espacio hasta el último detalle. Pueden separarse zonas conforme a su utilidad: recepción, clínica, administración, etc.
-Circulación. La fluidez es un factor de gran importancia para controlar el estrés. Hay que procurar un acceso fácil, con recorridos cortos y en espacios suficientemente amplios para evitar la acumulación de personas. Las formas curvas ayudan a generar unos recorridos fluidos, que al mismo tiempo transmiten una sensación de suavidad.
-Iluminación y privacidad. La luz es otro aspecto esencial que mejora la percepción del paciente. Es una buena idea ubicar la recepción y la sala de espera en una zona con luz natural y añadir una iluminación artificial cálida y suave.
-Diseño interior. Un entorno tranquilo, de formas simples, colores suaves, materiales naturales y luz cálida, afectará positivamente en el estado de ánimo de las personas y les ayudará a reducir su estrés.
-Imagen corporativa. El concepto y los valores de la clínica deberían reflejarse en toda su imagen: la identidad corporativa, la web, el exterior del local y hasta los últimos detalles en su interior, como los rótulos y la señalética.
-Aspecto exterior. La fachada de la clínica representa la oportunidad de captar nuevos pacientes. Cada vez más clínicas se ubican en la planta calle, a veces junto a vías de tráfico importante.