La candidiasis bucal o moniliasis representa una enfermedad infecciosa de la boca provocada por la presencia de un hongo de la levadura, llamado “Cándida Albicans”, el cual afecta a las membranas mucosas o el revestimiento de la boca.
Este tipo de infección manifiesta lesiones de color blanco en el interior de la mejilla o en la lengua, pudiendo extenderse a las encías, la parte de atrás de la garganta o el techo de la boca. La candidiasis bucal se presenta comúnmente en los bebés y niños pequeños, así como también en personas con sistemas inmunológicos debilitados o deprimidos.
Los síntomas que destacan a la candidiasis oral son las manchas blancas en la lengua y la boca, que pueden alcanzar gran proporción cuando se unifican transformándose en grandes manchas, pudiendo causar ardor en la garganta y la boca, así como un dolor muy incomodo al tratar de ingerir alimentos.
En casos extremos puede llegar a extenderse hasta el esófago y en tal caso estaríamos en presencia de una condición denominada “esofagitis por cándida”, afectando la deglución de los alimentos. Otro factor común respecto de la enfermedad y los bebés, es que todos los recién nacidos sanos presentan síntomas candidiasis oral dentro de las primeras semanas de vida.
Los bebés manifiestan inquietud y se niegan a comer e incluso pueden transmitir la infección a la madre cuando amamantan y cuando esto sucede los senos se infectan generando una piel escamosa alrededor de la areola, además de sensibilizar a los pezones generando dolor en el proceso de lactancia.
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