Hoy en día, la implantología dental evoluciona de forma rápida. Por eso, cada vez son más las posibles soluciones que se pueden dar ante el bruxismo, las caries o la periodontitis. Una gran solución es el implante dental.
En lo casos en los que falta alguna pieza dental, los implantes dentales son la solución perfecta. La colocación de un implante dental consiste en instalar un tornillo de titanio dentro del hueso maxilar, si el hueco está en la parte superior de la boca, o del hueso mandibular, si se encuentra en la parte inferior. El tamaño del implante dental dependerá del hueco que deje el diente que se ha caído. Una vez colocado el tornillo, se podrá poner una pieza dental artificial.
Asimismo, existen dos tipos de implantes dentales. Por una parte, el implante dental de carga inmediata, con el que no es necesario abrir la encía para insertar el implante. Se coloca el implante dental y se fija la corona a la vez. Por otra parte, el implante dental que se hace en dos fases: la primera fase de colocación del implante dental es para introducirlo y se integre en el hueso. Después de 3 y 6 meses en función de la zona que sea, colocaremos el pilar y la corona.
En todo momento, el especialista debe interesarse por el estado de la encía, para ver si hay masa de hueso suficiente a la hora de instalar el implante dental. Sin embargo, si el paciente carece de hueso existen los implantes cigomáticos, una novedosa e innovadora técnica que utilizan en numerosas clínicas dentales ubicadas en el centro de Madrid.
Los implantes cigomáticos, son la solución perfecta para aquellas personas que han perdido tanto sus dientes como el hueso maxilar de la arcada superior. Además, se pueden colocar en una única operación y, al día siguiente, el paciente ya podría llevar una prótesis fija provisional, por lo que los tiempos de espera son mucho más cortos que en otros procedimientos similares. Una vez los tejidos hayan cicatrizado, esta prótesis se sustituiría ya por la definitiva.
Después de esta cirugía, el paciente volverá a su rutina con total normalidad, con un aumento de su autoestima. Por tanto, gracias a estos implantes cigomáticos, la pérdida del hueso maxilar superior ya no supone ningún obstáculo para tener una dentadura adecuada y fija.
