Algunas tareas sencillas de ejecución diaria pueden marcar la diferencia entre una salud bucodental óptima y padecer enfermedades en dientes, encías y mucosas.
La mayoría de los profesionales de la odontología coinciden en las más importantes recomendaciones para garantizar la salud de la boca.
Estos son algunos de ellos:
-Lavarse los dientes dos veces al día durante al menos dos minutos con una pasta dental con flúor.
-Usar de hilo dental para remover la placa bacteriana, u otro sistema de limpieza interdental.
-Las personas adultas mayores o con alguna deficiencia motora, deberían usar cepillos eléctricos, ya que son una excelente alternativa frente al cepillo manual.
-La decisión de cambiar el cepillo dental depende de varias variables como el tipo de cerdas usadas, la frecuencia de cepillado, la técnica de cepillado, la calidad del cepillo y después de una gripe o infección de la garganta.
-Se debe cambiar el cepillo cada 3 a 4 meses para prevenir males dentales y cuidar de nuestros dientes.
-Visitar al odontólogo cada dos a seis meses, dependiendo del paciente. De manera estándar se sugiere una visita cada seis meses ya que la formación de placa o el desarrollo de enfermedades periodontales tarda alrededor de tres a seis meses.