La pérdida de un diente puede ser una experiencia desalentadora, pero gracias a los avances en la odontología, existen soluciones efectivas como los implantes dentales.
Los implantes dentales son piezas de titanio que se insertan en el hueso, sirviendo de base para el nuevo diente. Son la mejor opción para reemplazar dientes perdidos, ya sea por enfermedad, traumatismo o caries avanzada.
Los implantes dentales ofrecen varios beneficios. En primer lugar, proporcionan un soporte estable a los dientes artificiales sin deslizarse en la boca, permitiendo hablar con normalidad, masticar o sonreír. Además, se elaboran con la misma forma y color de los dientes naturales, lo que ayuda a mantener una apariencia natural.
Los implantes pueden usarse para reemplazar una sola pieza o un puente de varias. En casos más extremos, donde falten todas las piezas dentales, el implante de prótesis fija puede ser la mejor solución definitiva. Para este último, se acostumbra a implantar en el hueso ocho piezas de titanio, que sujetarán las prótesis repartiendo adecuadamente la fuerza de la masticación.
