Seguimos hablando de las consecuencias negativas que puede traer los tratamientos exprés para el blanqueamiento dental.
Tengamos en cuenta que el empleo del agua oxigenada es bastante polémico, muchos centros de blanqueamiento señalan que el gel que usan no dañará los dientes, ni el esmalte y su aplicación es totalmente sin dolor, dado que el gel no cuenta con peróxido de hidrógeno sino que tienen perborato de sodio. Esto puede llegar a ser falso. Cuando el perborato de sodio, agente blanqueador que se encuentra en los detergentes y lejía, es mezclado con el agua genera peróxido de hidrógeno en concentraciones que pueden llegar hasta el 35 por ciento. Ante esta situación se supo que algunos centros no autorizados señalaron que si tuvieran que actuar conforme la ley deberían cerrar.
Lo cierto es que estos productos cuentan con peróxido de hidrógeno que tiene un gran poder oxigenante, lo que permite descolorar una sustancia con color. Lo preocupante son las lesiones irreversibles que pueden generarse como consecuencia de una alta concentración y un uso continuo de peróxido. Si la persona que pasa por el tratamiento tiene hipersensibilidad en los dientes, alteración en su esmalte e irritación de las mucosas las consecuencias pueden ser serias, empezando por el hecho de que se provocará un desgaste prematuro y una mayor fragilidad de los dientes.
A partir de la aparición de estos establecimientos los profesionales han ampliado el listado de contraindicaciones, desaconsejando los tratamientos sobre los dientes con caries, o que tengan diferentes lesiones por desgaste o abrasión.
En relación a los resultados de estos blanqueamientos existen diferentes opiniones. Algunas personas que lo realizaron señalaron que salieron con una sonrisa extremadamente blanca y muy poco natural y en otros casos señalaron que los resultados fueron casi imperceptibles. A otras personas la luz LED les ha irritado las cuerdas vocales y la garganta, en los casos en que se lastimaron las encías las personas no pudieron cepillarse por algunos días ni pudieron comer alimentos ácidos.
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